El origen de esta raza es similar al de las otras razas de trineo. Su nombre proviene de la gran isla polar (Groenlandia) donde su difusión ha sido mayor. El Groenlandés ha trabajado y aún trabaja en tiros y, por lo tanto, su obediencia al amo es tal vez menor con respecto a otros perros, aunque también se le utiliza para perseguir y cazar osos y caribúes, actividad en la cual demuestra un valor extraordinario.